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Boletín de Coyuntura, N º 16; marzo 2018; ISSN 2528-7931; UTA – Ecuador; Pág. 4-6
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MCJ: Doctor en Economía. Profesor de tiempo completo. Facultad de Economía de la Universidad Nacional Autónoma de México. Consultor privado. E-Mail: miguelc@economia.unam.mx
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ELC: Licenciado en Economía. Profesor. Facultad de Economía de la Universidad Nacional Autónoma de México. Consultor privado. E-Mail: leoncastaneda30@gmail.com
Estimación de la función de utilidad del consumidor
ecuatoriano en el año 2012
Fecha de recepción: 8 de Diciembre 2017 Fecha de aceptación: 28 de Marzo 2018
Miguel Cervantes - Jiménez
1
, Eduardo León- Castañeda
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Resumen
El presente artículo genera tres funciones de utilidad del consumidor
ecuatoriano en los ámbitos nacional, urbano y rural con base en una
función de utilidad tipo Cobb-Douglas y datos de la Encuesta Nacion-
al de Ingresos y Gastos de Hogares Urbanos y Rurales 2011-2012,
cada una con doce bienes cuyos exponentes representan la propor-
ción del gasto de cada bien respecto al gasto total. Los consumidores
del Ecuador destinan la mitad de gasto en alimentos y bebidas no
alcohólicas, transporte y otros bienes y servicios. El gasto destinado a
los alimentos en las zonas urbanas y rurales es de 23 por ciento y 32
por ciento, respectivamente. El decil I destina el 60 por ciento de su
ingreso a satisfacer estas necesidades, mientras que el decil X utiliza
entre el 41 y el 50 por ciento de sus recursos, dependiendo de si habitan
zonas urbanas o rurales, respectivamente. Las funciones de utilidad
de los consumidores se pueden utilizar para analizar los efectos de
la aplicación de políticas públicas como el establecimiento de precios
controlados, subsidios o de cambios impositivos.
Palabras clave: Preferencias, función de utilidad del consumidor,
función Cobb-Douglas, consumo.
Abstract
This article generates three consumer utility functions at the national,
urban and rural level based on a Cobb-Douglas type utility function and
data from the National Survey of Income and Expenditures of Urban
and Rural Households 2011-2012, each with twelve goods; exponents
represent the proportion of the expenditure of each good regarding the
total expense. Consumers in Ecuador spend half on food and non-alcoholic
beverages, transport and other goods and services. Spending on food
in urban and rural areas is 23 percent and 32 percent, respectively.
The decile I allocate 60 percent of its income to satisfy these needs,
while the decile X uses between 41 and 50 percent of its resources,
depending on whether they inhabit urban or rural areas, respectively.
The consumer utility functions can be used to analyze the eects of the
application of public policies such as the establishment of controlled
prices, subsidies or tax changes.
Keywords: Preferences, consumer utility function, Cobb-Douglas function,
consumption.
Introducción
El gasto en consumo nal de los hogares es la variable agregada más
importante de las economías en el mundo, ya que ocupa entre el se-
senta y ochenta por ciento de la producción total. En el caso de la
economía ecuatoriana entre los años 2010 y 2016, según cifras del
Banco Central del Ecuador, el PIB creció 3,4 por ciento en promedio
cada año, en tanto el consumo de los hogares creció en promedio anual
al 1,8 por ciento, lo que incidió para que la proporción del consumo de
los hogares respecto del Producto Interno Bruto (PIB) bajara de 65 por
ciento a 59 por ciento del año 2010 al 2016; en contraste, el gasto de
consumo nal del gobierno ascendió de trece a quince por ciento en
el mismo periodo.
El objetivo del presente artículo es generar tres funciones de utilidad del
consumidor ecuatoriano en los ámbitos nacional, urbano y rural con
base en una función tipo Cobb-Douglas y datos provenientes de la En-
cuesta Nacional de Ingresos y Gastos de Hogares Urbanos y Rurales
2011-2012, cada una con doce bienes.
El artículo se estructura en dos apartados, en el primero, se presenta la
metodología fundamentada en la elección racional de los consumidores
de la escuela neoclásica utilizando una función de utilidad del consumi-
dor tipo Cobb-Douglas y, en el segundo, se exhiben los resultados de
la construcción de la función de utilidad del consumidor ecuatoriano en
los ámbitos nacional, urbano y rural utilizando los datos de la encuesta
señalada. Al nal se incluyen las conclusiones.
Metodología
Para identicar las jerarquizaciones de las preferencias del consumidor,
la teoría neoclásica desarrolló las funciones de utilidad. Para Cervantes
(2014, pág. 65), las “funciones de utilidad son una forma matemática de
describir el sistema de preferencia”, en donde lo importante es el orden y
no el valor que asume la función, ya que no existe la medida de “útiles”.
Las preferencias de los consumidores se construyen a partir de axiomas, a saber:
· Completitud: dadas dos canastas de consumo (x
1
,x
2
) y (y
1
,y
2
), si (x
1
,x
2
)
≥ (y
1
,y
2
) ó (y
1
,y
2
) ≥ (x
1
,x
2
) ó las dos situaciones, entonces el consumidor es
indiferente a cualquiera de las dos canastas (x
1
,x
2
) ~ (y
1
,y
2
). Lo importante de
este axioma radica en que el consumidor puede identicar y comparar todas
las canastas de consumo.
· Reexividad: cualquier canasta es al menos tan preferida como ella misma:
(x
1
,x
2
) ≥ (x
1
,x
2
).
· Transitividad: Dadas tres canastas (x
1
,x
2
),(y
1
,y
2
) y (z
1
,z
2
) si (x
1
,x
2
) ≥ (y
1
,y
2
) y
tenemos que (y
1
,y
2
) ≥ (z
1
,z
2
), entonces (x
1
,x
2
) ≥ (z
1
,z
2
).
· Monotonía: si (x
1
,x
2
) ~ (y
1
,y
2
) si a la canasta (y
1
,y
2
) se le agrega una unidad
de algún bien se tiene que (y
1
+1,y
2
) > (x
1
,x
2
).
· Convexidad: cuando las canastas son convexas se preeran las canastas me-
dias a las extremas, si (x
1
,x
2
) ~ (y
1
,y
2
) y la media ponderada es la canasta (0.5x
1
+
0.5y
1
,0.5x
2
+0.5y
2
), dicha canasta es al menos tan buena como los extremos.
A partir del sistema de preferencias se construyen las funciones de utilidad, las
que deben cumplir las siguientes propiedades: la utilidad de la canasta (x1, x2)
será mayor que la utilidad de la canasta (y1, y2), si y sólo si, la canasta (x1, x2) es
estrictamente preferida a la canasta (y1, y2), o sea,
(Cervantes, 2014).
A pesar del reducido uso de este tipo de herramienta en la evaluación
económica, se han realizado algunos esfuerzos, principalmente en el cam-
po de los modelos de equilibrios general computables deterministas o es-
tocásticos, en los que se ocupan funciones de utilidad a partir de las cuentas
nacionales, constituyéndose en la principal función objetivo de un modelo
para la evaluación de políticas públicas.
Se han explorado otras aplicaciones de la función de utilidad a través de los
modelos de elección discreta con modelos logit y tobit, tal como se muestra
en el libro Microeconometría y decisión de autoría de Cabrer, Sancho y Serrano
(2001) y en Microeconometría de Arcarons y Ramírez (2012).
También se han utilizado con diferentes herramientas econométricas para
la medición de los parámetros de funciones de utilidad, principalmente
translogaritmicas y Cobb-Douglas. En este tenor, Holman (1998) estimó una
función de utilidad con decisiones intertemporales, por lo cual aparece el
consumo en bienes para periodos distintos y añade las tenencias de dinero
como otro bien que genera utilidad, esta medición la realizó a través del
método de momentos generalizados. Ewis y Fisher (1984) realizaron la es-
timación de la función de utilidad de la demanda de dinero para el caso de